Publicado: jueves, 05 de febrero de 2015
Vecinos del barrio lorquino de Alfonso X han hecho públicas durante esta semana sus quejas sobre la plantación de decenas de cipreses en las nuevas zonas ajardinadas que está construyendo la Comunidad Autónoma en ese distrito y han afirmado que "esto ahora parece un cementerio".
La elección de estos árboles ornamentales que perfilan, junto a ejemplares de naranjo, la avenida carretera de Granada no han gustado al vecindario, que recuerda que Alfonso X fue construido sobre un viejo cementerio y que afirman que ese arbolado "recuerda demasiado" aquel pasado de zona mortuoria.
Los vecinos han expresado esta queja ante los periodistas durante una rueda de prensa en la que el concejal de IU-V Pedro Sosa estaba poniendo de relieve distintas deficiencias en la ejecución de las obras de regeneración urbana que, tras los terremotos, está desarrollando el Gobierno regional en el barrio con una inversión de 4,5 millones de euros, informa Efe.
Juan Pedro Martínez Gázquez, uno de los vecinos, ha expuesto a las autoridades que "hay muchos tipos de árboles. No me parece correcto que hayan elegido cipreses, esto ahora se parece a un cementerio". Opinión que ha compartido Manoli García, que ha censurado la elección de árboles de escaso porte y sin posibilidades de dar sombra a los grandes espacios abiertos de uso público que han supuesto las obras, que en su opinión "están hechas con materiales de segunda, reutilizados" de otros proyectos, ha explicado.
El presidente de la asociación de vecinos de Alfonso X, Francisco Antonio Ceballos, ha afirmado que los residentes en Alfonso X "no están contentos" con el resultado de las obras y ha explicado que las aceras han sido recrecidas en 30 centímetros, lo que provocará que el agua de lluvia entre en el interior de las viviendas. También ha afirmado que los trabajos de obra pública han provocado desperfectos en edificios que ya habían sido reparados tras los terremotos y que aún no han sido solventados, pese a que la Comunidad tiene consignados 200.000 euros de fianza para la reparación de esos daños.
El concejal de IU ha hecho suyas estas quejas y ha afirmado que la plantación de cipreses, que no había sido consensuada con los vecinos, "está provocando malestar" en los ciudadanos y ha afirmado que algunos de los jardines han sido rellenados con escombros en lugar de con tierra.
También ha censurado la falta de sombras vegetales y ha criticado que la opinión de los vecinos no esté siendo tenida en cuenta, al tiempo que ha censurado que se hayan mantenido viejos ejemplares de palmera que invaden el tránsito peatonal en las aceras y que caen sobre los tejados de las casas. Asimismo ha afirmado que las obras no han incluido la renovación de la red de saneamiento y que algunas de las farolas estén literalmente pegadas a tejados y fachadas.
En este barrio, integrado en su mayor parte por el complejo "Las casas baratas" -único ejemplo de arquitectura tardofranquista- construido en 1958 y habitado en gran medida por ancianos, las obras están afectando a una superficie de 65.000 metros cuadrados.
Los trabajos han consistido en la mejora del eje central que conforman la calle Jiménez Puertas y las plazas públicas Virgen del Alcázar, Antonio Navarro y Paco Juan Sánchez, que han dado como resultado un espacio unificado con forma de bulevar continuo.