Publicado: jueves, 10 de octubre de 2013
El consejero de Educación, Cultura y Deporte, Luciano Alonso, ha asegurado hoy que el Gobierno andaluz mantiene "sus compromisos técnicos y presupuestarios" lo que permitirá reanudar durante el primer trimestre del 2014 las obras del Museo Ibero de Jaén.
Alonso ha realizado este anuncio durante una reunión con la presidenta de la Asociación de Amigos de los Iberos, Pilar Palazón, donde se ha abordado la situación de esta infraestructura cultural, cuya primera piedra se puso en noviembre del 2009 y estaba previsto que finalizase a lo largo del 2012.
Además, Alonso ha informado a los representantes de esta asociación de que la tramitación de la modificación del proyecto arquitectónico está ya en su recta final, por lo que se espera que a principios del año próximo prosigan unos trabajos paralizados desde mayo del 2012.
Las obras se detuvieron, según la Consejería, por razones técnicas, ante la necesidad de modificar el proyecto para adaptarlo a la nueva normativa vigente y solventar requerimientos de tipo museológico.
Con las obras al 55 % de su ejecución, la Consejería prepara el diseño museográfico de este espacio que ofrecerá una amplia visión de la cultura íbera, ya que reunirá los fondos de este periodo histórico existentes en Andalucía.
El Museo Ibero de Jaén se construye en el solar de la antigua prisión de la ciudad, y se articulará alrededor de un espacio central, con cuatro áreas funcionales, dos públicas y dos internas. Además, conectará al público con los yacimientos de las ciudades fortificadas de Puente Tablas, Cástulo, Atalayuelas y Giribaile; con los santuarios de Despeñaperros y El Pajarillo y con las Cámaras funerarias de Toya y Castellones de Ceal, entre otros.
La base de la colección estará constituida por los fondos íberos del Museo Provincial de Jaén, que ya alberga el mayor legado de Europa en este arte, la mayoría de las piezas se encuentran catalogadas pero guardadas por falta de espacio, y con ello se pretende ofrecer una visión de una de las culturas autóctonas de mayor desarrollo en el sur y levante de la Península Ibérica, que conoció su mayor esplendor entre los siglos V y III a.C.