Publicado: jueves, 24 de noviembre de 2022
Redacción de Adiós Cultural / Fotografías: Chema Moya
El pasado martes, en uno de los salones del Palacio de Linares, sede de la Casa de América, Adiós Cultural y Funespaña entregaron los premios del VII Concurso de Cementerios de España que convocan desde el año 2014.
El acto fue presentado y conducido por la periodista y locutora Ana Blanco, y contó con la presencia de Alberto Ortiz, presidente de Funespaña y de Panasef; Ramón Llaona, director general de Funespaña; Jesús Pozo, periodista y director de la revista Adiós cultural; directivos del sector asegurador y funerario; así como diferentes personalidades institucionales de los ayuntamientos y cementerios premiados.
Los cinco cementerios españoles ganadores en sus respectivas categorías recibieron sus correspondientes placas, así como los que quedaron en segunda y tercera posición según la decisión de los diferentes jurados, profesionales del sector funerario y especialistas en arte, historia, medioambiente y promoción cultural y turística.
Los premios fueron: Mejor cementerio: cementerio municipal de Valencia; Mejor iniciativa medioambiental: cementerio municipal de Bilbao; Mejor monumento: La Losa del Tiempo, en el cementerio municipal La Carriona de Avilés (Asturias); Mejor actividad pública realizada en el cementerio: cementerio de Ballena de Castro Urdiales, (Cantabria), Votación popular de "cementerio más bonito": cementerio de Os Eidos de Redondela (Pontevedra).
Abrió el acto el director de la Adiós Cultural, Jesús Pozo (en la foto de arriba durante su intervención delante de Ana Blanco, presentadora del acto), expresando la importancia de este evento en el sector funerario y la mayor importancia que tiene para cualquier pueblo de España, por muy pequeño que sea, de proteger y cuidar sus cementerios “porque en ese espacio al aire libre y en el que puede pasear cualquier ciudadano está la historia de los hombres y mujeres que hicieron esa comunidad. En cualquier pueblo hay personas que son dignas de ser recordadas, homenajeadas y protagonistas de la historia particular para se enseñada a las nuevas generaciones”.
Pozo valoró y explicó la importancia que tiene cada uno de los premios porque son aspectos culturales, turísticos, patrimoniales y ambientales que representa el progreso y la educación de cada localidad en la que están ubicados”. Y sobre el cementerio más bonito, explicó el director de Adiós Cultural, que siempre gana en el que se implican más sus vecinos porque están orgullosos de ese espacio natural. “Y en España, por suerte, hay miles de cementerios bonitos que pueden ganar nuestro concurso”.
Clausuró el acto Ramón Llaona, director general de la compañía explicando que “en Funespaña creemos que hay que preservar y recuperar el recurso artístico y monumental que tienen los cementerios de España, poner en lugar su papel en la sociedad por su valor histórico, artístico, demográfico, antropológico, turístico y económico. Además de su lenguaje simbólico, su arquitectura, los paisajes, la botánica o sus personajes ilustres, que nos ofrecen un importante recurso cultural que permite hablar del pasado y del más allá con formas bellas. El sentido de este concurso de cementerios evidencia nuestro compromiso con las personas y la sociedad".
Os Eidos
La alcaldesa de Redondela, Digna Rivas, fue la primera en recoger el premio al cementerio ‘más bonito’. Explicó “la ciudadanía se ha involucrado muchísimo para que ganara Os Eidos. Este premio pone a Redondela en el punto de mira a nivel nacional”, quien también aseguro que esperan a una importante cantidad turistas interesados en conocer un cementerio que se remonta a 1870”.
Rivas explicó que el espacio ha sido recientemente rehabilitado y “está considerado hoy en día cementerio histórico por la Diputación de Pontevedra y aspira a entrar en la lista de cementerios singulares de Europa. La sepultura más antigua es de 1860 y la más moderna de 1988. Actualmente, este cementerio ya no tiene capacidad para acoger a más defuntos”. Entregó el premio Alberto Ortíz, presidente de Funespaña.
Bilbao
La teniente de alcalde y concejala del Área de Salud y Consumo del Ayuntamiento de Bilbao, Yolanda Díez, recogió el premio a la mejor iniciativa medioambiental y el tercero en la sección Mejor Actividad Pública.
“En el Ayuntamiento de Bilbao y en el Área de Salud y Consumo y Bilbao Zerbitzuak nos sentimos emocionados y agradecidos, pero, sobre todo, nos sentimos orgullosas y orgullosos de este reconocimiento porque premia el interés histórico, social, artístico y patrimonial de nuestro Cementerio de Bilbao y su capacidad tractora en la capital”, dijo Díez.
“Nosotros intervenimos en lo local para influir en lo global. Entendíamos que el cementerio de Bilbao tenía que ser sostenible y estamos alineados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Y es verdad que hoy, que s tan importante la energía tenemos una reducción de un 50 por ciento del gasto eléctrico, una flota de coches totalmente eléctrica y homenajeamos así a la segunda ciudad de Bilbao, esa ciudad de recuerdos de nuestros antepasados y de la gente que ha hecho posible la ciudad que hoy tenemos”.
Castro Urdiales
La concejala de Turismo y Patrimonio del Ayuntamiento de Castro Urdiales, Rosa Palacio, recogió el galardón en la categoría de ‘Mejor Actividad Pública”. La edil destacó el “honor que supone recoger este premio que demuestra que el trabajo bien hecho da sus frutos, y que este reconocimiento avala el esfuerzo que hay detrás de su concejalía, por promocionar el cementerio de Ballena. El Ayuntamiento ha realizado numerosas actuaciones divulgativas del patrimonio arquitectónico del Cementerio de Ballena y en este caso se ha valorado el esfuerzo y la capacidad de romper las barreras lingüísticas, con la mejora gracias, a las tecnologías desarrollando video guías en Lengua de Signos y promoviendo la inclusividad de la difusión de su historia social, de su patrimonio y su valor como Bien de Interés Cultural “, ha destacado Palacio.
Desde el 2019, la concejalía de Turismo y Patrimonio “se ha volcado en crear una red de accesibilidad de la información cultural y turística, centrándose no sólo en la señalética o planos hápticos, sino también en crear espacios, y museos más accesibles, promoviendo el turismo inclusivo y trabajando en los Objetivos de Desarrollo Sostenible”. Entregó el premio Crisitina de Gregorio, directora de Marketing y Comunicación de Funespaña.
La Carriona
Por su parte, la alcaldesa de Avilés, Mariví Monteserín, y el artista Carlos Suárez, recogieron el premio al "Mejor monumento" concedido a la escultura "La losa del tiempo" instalada en el cementerio de La Carriona.
Mariví Monteserín ha señalado que "con la 'Losa del tiempo' pretendemos rendir homenaje a las víctimas de la Guerra Civil. Es un espacio ubicado en un espacio singular de profundo recogimiento, el antiguo osario del cementerio, que nos permite percibir el silencio como el paso previo a la palabra, la reflexión y el entendimiento. Es un contra-monumento porque no busca el enaltecimiento de ninguna parte sino la reflexión conjunta ante unos sucesos que nuestro país nunca debe repetir". Añadió la alcaldesa avilesina que "es una obra que nos obliga a reescribir el discurso museográfico de nuestro cementerio, de esas obras maestras de la escultura asturiana, centradas entre los años 1890 y 1940. Pasamos ahora, con la 'Losa del tiempo' a la incorporación del arte contemporáneo".
Por su parte, Carlos Suárez declaró que "es una enorme satisfacción poder presentar un proyecto de mi ciudad, Avilés, en la Casa América y recibir este premio. Quiero agradecer especialmente al Ayuntamiento de Avilés, a la alcaldesa, la confianza que depositó en mi para desarrollar la 'Losa del tiempo'. Es un proyecto que nos ha llevado varios años de trabajo, complejo… Y al final generamos un espacio de memoria y reflexión que queremos compartir con todos los avilesinos”.
'La losa del tiempo' es un monumento de reflexión y memoria en recuerdo de las víctimas de la Guerra Civil y el franquismo, un proyecto escultórico obra de Carlos Suárez, que cuenta con la colaboración documental y artística de Jaime Luis Martín y Pablo Martínez Corral.
Se configura como un espacio de recogimiento simbolizado por sillas; unas rotas en memoria de las víctimas, y otras nuevas como representación del diálogo. Todo ello se sitúa bajo y en torno a una losa de acero, el símbolo de una villa siderúrgica. Entregó el premio Ana Valtierra, responsable de las páginas de Arte de Adiós y profesora en la Universidad Complutense.
Valencia
Alejandro Ramon, concejal valenciano de Cementerios y Servicios Funerarios, recogió el premio al mejor de España, el Cementerio General de Valencia. Ramon explicó que este lugar tiene un papel protagonista en la ciudad, “desde su vertiente histórica y patrimonial como en cuanto a los nuevos retos que afronta la ciudad, como por ejemplo la transición energética en un contexto de emergencia climática”. Ramón mencionó la instalación de hasta 7.000 placas fotovoltaicas en este lugar, así como “las rutas del silencio, que hacen valer la historia que nos ha hecho llegar hasta hoy día”, y el éxito de la urna árbol como opción para los vecinos.
Al finalizar el acto de entrega de los premios, ha tenido lugar un cóctel posterior en la sala Embajadores, antiguo salón de baile del Palacio de Linares.
Desde la primera edición del concurso, en 2014, este Concurso de Cementerios de España se ha convertido en uno de los eventos culturales más importantes del sector funerario y en un referente para los ayuntamientos, que llevan años priorizando el cuidado de sus cementerios y promoviéndolos como espacios integrados en la ciudad que merecen ser visitados. La iniciativa busca reconocer el interés histórico, social, artístico y patrimonial de los cementerios españoles.
Funespaña y la revista "Adiós cultural" han realizado una importante labor de concienciación a la ciudadanía sobre la importancia patrimonial que albergan los recintos. Como resultado de la enorme repercusión mediática de las anteriores convocatorias, han conseguido fomentar los cementerios como recursos turísticos en los pueblos participantes, para reivindicarlos como lugares llenos de vida y del recuerdo de la gente que los habitó. Entrego el premio Ramón Llaona, director general de Funespaña.