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Revista Adiós

"Hay que dar vida a la vida. No vida a la muerte". Javier Tomeo después de firmar su testamento vital

Publicado: miércoles, 26 de junio de 2013

"Hay que dar vida a la vida. No vida a la muerte", dejó dicho el escritor Javier Tomeo después de firmar su testamento vital, y sus más allegados han organizado un funeral en el que han rememorado los momentos que pasaron juntos, han leído algunos párrafos de su obra, e incluso han dado a conocer el parte médico de defunción, sin olvidar que a veces se dormía en el cine o que escribía de monstruos para personas mayores, no para niños. El cuerpo de Tomeo será enterrado en Quicena (Huesca), donde nació un 9 de septiembre de 1932, informa Efe.
El cantante Javier Gurruchaga, el escritor Ignacio Martínez de Pisón, los editores Jorge Herralde y Enric Cucurella, familiares, amigos, y miembros de los gobiernos de Cataluña y Aragón han despedido hoy a Javier Tomeo, en una ceremonia laica. Su amigo Pep Armengol ha abierto el acto, agradeciendo a los presentes el estar junto al fallecido antes de su traslado al cementerio y ha aseverado que Tomeo era, "ante todo, un escritor, después un aragonés, un republicano y un ciudadano de Barcelona, a la que amaba por distintas razones". Ha glosado su vida y ha rememorado que solía escribir entre las cinco de la madrugada y las diez de la mañana, porque entendía que a partir de las cinco de la tarde se producía "el cansancio de los materiales". Le ha calificado de clásico, un escritor de difícil imitación, con un particular sentido del humor, capaz de llevarle a decir ante la defunción de un conocido: "Se muere gente que no se había muerto nunca". Asimismo, ha animado a los presentes a trabajar para preservar su "memoria y su autoría" de cara a las generaciones futuras.
El periodista Àlex Salmon, vecino de Tomeo durante años, ha asegurado que en su piso de la calle Roger de Flor es donde habitaban sus monstruos y ha dado a conocer el último "Calidoscopio" que escribió para el diario El Mundo, antes de entrar en la UCI. El texto está escrito a mano y en él ironizaba que en estos tiempos de recortes no les iría mal a los ayuntamientos contar con funcionarios de tres ojos, de tres colores diferentes, haciendo un servicio similar al que prestan los semáforos.
Su amigo Ismael Grasa se ha sumado al acto con una antología de los escritos suscitados por la muerte del escritor por parte de algunos de sus amigos, como Luis Alegre o Jorge Herralde.
Antes de la ceremonia, el escritor Ignacio Martínez de Pisón ha considerado a Tomeo un personaje, lo que se transmitía a su obra y también al final de su vida, puesto que ha habido diferentes momentos de cierto surrealismo en las últimas horas, como cuando ayer se presentaron una treintena de personas al tanatorio antes de que se instalará el féretro.
A su juicio, se trata de alguien "irrepetible", coincidiendo en este punto con el crítico teatral Joan de Sagarra, quien ha asegurado haber perdido a un amigo y a un vecino, que consiguió "lo que ningún otro autor español pudo, es decir, que se estrenaran tres obras suyas en tres grandes teatros de París".