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Revista Adiós

José Luis Sampedro: "La muerte es el precio que pagamos por estar vivos, sencillamente"

Publicado: martes, 16 de abril de 2013

 
Sampedro durante una de sus últimas e íntimas entrevistas concedidad al programa "Salvados".

“Pienso vivir lo mejor posible, con dignidad. Lo que no nos enseñan a hacer en esta civilización, que es morir como un acto vital. La vida es mi referente”. Así de contundente se despedía José Luis Sampedro durante el acto en el que se le concedió la Medalla de honor de las artes, uno de sus últimos actos públicos.
Posteriormente, durante una entrevista mantenida con TVE, amplió su visión de la muerte: “Estamos acostumbrados a ver la muerte como negativa, como pesimista. Naturalmente, yo estoy tan cerca que no puedo dejar de pensar en este asunto. Pero pienso con alegría vital. Pienso que lo que no nos enseñan es que el día que se nace, se empieza uno a morir; y que a lo largo de nuestra existencia, la vida y la muerte nos están acompañando. Soy en parte muy partidario de la filosofía oriental de la unión de los contrarios. Pienso que la vida no sería posible sin la muerte. La muerte es la que permite la vida sucesiva. Piense usted que no hubiera muerto toda la cantidad de gente que no ha vivido, esto sería insoportable. No, no soy pesimista. Lo que si soy es realista. Y, desde luego lo que veo, es que la situación está muy deteriorada”.
Tiempo antes, en una entrevista concedida a la agencia Efe, José Luis Sampedro aseguraba que “la vida es un arder y el que no arde no vive". Esa frase da idea de la intensidad con que vivió este gran humanista, escritor y economista, que siempre procuró "ser honesto" y "no hacer daño a nadie deliberadamente".
Son innumerables las frases que se podrían entresacar de las que fue pronunciando este gran escritor relacionadas con la muerte. Pero si hay una que define su particular y ejemplar visión es esta: "La muerte es el precio que pagamos por estar vivos, sencillamente".
Muy disconforme con la evolución del mundo y con las consecuencias de la globalización económica, cuando cumplió noventa años se mostraba consciente de que iba a morir pronto, pero decía que, "hasta cierto", lo haría satisfecho porque no le gustaba nada la situación de "desintegración del sistema" que se estaba viviendo.
Se refería a sí mismo como a "un personaje descatalogado y moribundo" que esperaba "tranquilamente" a la muerte. Pero al igual que, en los últimos años, también proclamaba su fe en la vida: "La vida es mi reina y señora", aseguró cuando recibió en 2008 la medalla de honor de la Complutense de Madrid, universidad a la que siempre estuvo vinculado, como estudiante y como profesor.

Entrevista realizada a Sampedro en el programa "Salvados"