La profesora de la UVA y colaboradora de “Adiós Cultural”, Mercedes Sanz de Andrés, investigará documentará el arte y la historia funerario que guardan todos los cementerios de la provincia.
El presidente de la Diputación de Segovia, Francisco Vázquez, entregó el pasado 29 de mayo las becas concedidas por el Instituto de la Cultura Tradicional 'Manuel González Herrero'.
Una de las tres becas concedidas en esta quinta edición, con una dotación económica de ocho mil euros, ha recaído en la colaboradora de “Adiós Cultural”, la profesora de la Universidad de Valladolid Mercedes Sanz de Andrés, que con el título 'Los cementerios de la provincia: museos al aire libre', estudiará durante un año todos los de la provincia.
Otra de las becas también tiene carácter funerario: 'De la cofradía al tanatorio: cambio y resistencia cultural en tierras de Segovia', presentada por el equipo formado por Luis Manuel Usero Liso, José Luis González Llamas y Joaquín Pérez García.
En el siguiente artículo Mercedes Sanz de Andrés explica el propósito y la necesidad de su investigación.
“Los cementerios de la provincia de Segovia: museos al aire libre”
Mercedes Sanz de Andrés
Con este trabajo comienza una línea de investigación para la provincia de Segovia que estudiará todos los cementerios, incluido el de la ciudad, como monumentos en sí mismos. Los cementerios son lugares privilegiados de nuestra Historia y la provincia de Segovia cuenta con el primer cementerio civil construido en España en el marco de la política ilustrada de Carlos III: el cementerio del Real Sitio de San Ildefonso (1783). Este cementerio, diseñado por José Díaz de Gamones, fue modelo de construcción para el resto de la Península, creándose en la propia naturaleza, un lenguaje para el reconocimiento del espacio fúnebre con unas determinadas características arquitectónicas, antropológicas y estéticas.
En su construcción y posterior Reglamento (9 de febrero de 1785) la muerte cambia de escenario y comienza así un lento pero seguro proceso de secularización de la muerte que tuvo su origen en una meditada base intelectual y científica que legitimaba la actuación del monarca. A partir de este Reglamento, todo el tejido jerárquico social de la vida se traslada al lugar de la muerte. Surge así la ciudad de los muertos como reflejo de la ciudad de los vivos con todo el bagaje socioeconómico y cultural que le es propio. En este sentido, el cementerio del Real Sitio de San Ildefonso es, no sólo pionero, si no paradigmático para otras poblaciones. Este espacio fue la solución a una serie de factores históricos como las epidemias por peste, el aumento demográfico o la presencia de “mondas de restos” en el siglo XVIII. Por esta razón histórica la investigación comenzará en el siglo XVIII momento en que la política ilustrada de Carlos III aisló a los muertos de la población y a partir de aquí, analizar cómo se fueron construyendo el resto de cementerios de la provincia de Segovia. Las posibilidades culturales y simbólicas que tienen los cementerios son múltiples porque utilizan el Arte y la Historia para hablar de realidades sociales, de crónicas de vida y de la relación dual con el pasado y con los sistemas culturales de la época en que se expresaron.
La metodología de la investigación se basa en un trabajo en archivos, consulta de fuentes bibliográficas y un riguroso trabajo de campo por los cementerios de los 209 municipios y 18 entidades locales. Se recopilarán y fotografiarán todas las huellas de nuestro pasado para conformar un mapa de patrimonio funerario en torno a los municipios. Como en un cementerio los protagonistas son sus moradores, se creará una relación de personas ilustres, relevantes y conocidas que se encuentren enterados en la provincia de Segovia. Los cementerios son una especie de ADN que nos permite escribir la vida de las personas desde la muerte y en este sentido el arte funerario y la palabra sentida de los epitafios, permiten hablar de realidades sociales y de crónicas de vida ofreciendo una determinada realidad antropológica y cultural en la celebración de la muerte de la provincia de Segovia.
Esta investigación quiere sentar las bases de un nuevo recurso cultural para Segovia porque muchos de sus municipios van a encontrar un revulsivo turístico en torno a su cementerio como lugares del patrimonio y parte integrante de su cultura y de su historia.
En la provincia de Segovia el cementerio nace como una nueva tipología arquitectónica en España donde la muerte encuentra su resonancia y donde la vida comienza a amar al ser querido desde la muerte. Es entonces cuando el ser humano necesita hablar del Más Allá y lo hace, además, con formas bellas. La belleza de estos recintos puede encontrarse en su propia ubicación en el medio rural, en algún epitafio, inscripción, escultura, panteón… porque la magia de estos espacios reside en sí mismos, en su propio concepto como lugares de recogimiento y en sus múltiples aspectos llenos de significado humano.
El arte de morir hace que estos espacios estén llenos de vida y de recuerdo de las personas que los habitan haciendo de ellos memoria viva, porque los cementerios no pueden morir.