Publicado: sábado, 12 de marzo de 2016
La histórica batalla de Cutanda, librada en el año 1120 entre almorávides y aragoneses en un punto cercano a Calamocha (Teruel), cuenta ya con la más moderna tecnología militar para determinar de forma precisa su emplazamiento. Se trata de la tecnología LIDAR, acrónimo de Light Detection And Ranging, que permite identificar zonas sobre el terreno donde puede haber indicios de restos de la batalla, según ha explicado a EFE el historiador militar e investigador del proyecto, Rubén Sáez.
Un láser realiza desde el aire un escaneo digital del campo de batalla y, mediante la reconstrucción de modelos tridimensionales, detecta anomalías topográficas de la zona, que deben ser analizadas posteriormente sobre el terreno por los investigadores para determinar si se trata verdaderamente de un hallazgo relevante.
Desde principios de enero, cuando comenzó a aplicarse esta tecnología en Cutanda, se han detectado 35 anomalías que los expertos van a comenzar a estudiar para determinar a qué obedecen. "La ventaja de esta tecnología es que acota enormemente el terreno en el que hay que trabajar y facilita la tarea, porque estos resultados reducen las 100 hectáreas sobre las que estábamos actuando", ha apuntado Sáez.
Los investigadores esperan que este método les permita encontrar fosas de los almorávides enterrados tras la batalla, tumbas de los aragoneses fallecidos y armamento usado durante el enfrentamiento.
Desde junio, cuando comenzó el proyecto para ubicar este hito histórico entre las tropas de Alfonso I el Batallador y el ejército almorávide, se han empleado también georradares, magnetómetros y detectores de cuadro, que han contribuido a proporcionar información. De hecho, en octubre de 2015 militares del Regimiento de Pontoneros y Especialidades de Ingenieros número 12 ya realizaron una inspección del terreno para recabar datos.
Este proyecto tiene como objetivo, además, sentar los principios metodológicos para la localización de batallas y convertirse en un referente a nivel nacional en este ámbito, ha señalado Sáez. A este respecto, ha recalcado que ya hay otros proyectos nacionales que, a causa del éxito de la técnica LIDAR en Cutanda, se están interesando en este método para aplicarlo en otros puntos del territorio español. "En España casi no se ha buscado la ubicación de las batallas y esta técnica puede ayudar a situarlas, puede ayudar a crear equipos tecnológicos y establecer las bases de los procesamientos de información", ha asegurado el historiador.
Aproximadamente doce personas trabajan en esta iniciativa ideada por la Asociación Cultural Batalla de Cutanda, entre los que se encuentran arquitectos, militares, arqueólogos e historiadores. Este proyecto, ha explicado, no dispone en la actualidad de financiación de las instituciones, sino que todas las intervenciones se están llevando a cabo de forma altruista por parte de los interesados en ubicar este hito histórico.
El proyecto nació con la intención de localizar el escenario del conflicto antes del noveno centenario de la batalla, que se celebrará en el año 2020.