Rafel Llinás Vallespir, considerado el maestro de varias generaciones de regatistas de Baleares, entre ellos, el campeón olímpico y ganador de una Copa América Jordi Calafat, y el subcampeón del mundo José Carlos Frau, falleció el pasado viernes en Palma a los 89 años.
La muerte de Llinás ha causado una gran consternación en el mundo de la vela, especialmente en los clubes náuticos donde dejó su impronta. Inició su carrera profesional en la enseñanza de la vela en 1971, y la finalizó en 1999.
La Bahía de Palma había estrenado en 2017 el Trofeo Mestre Rafel, con la colaboración de tres clubes –Club Nàutic Es Portitxol, Real Club Náutico de Palma y Club Náutico Arenal– de la Federación Balear de Vela, en homenaje a su figura.
El legado educativo de Rafel Llinás sigue vigente, según lo reconocen quienes tomaron su relevo y admiten seguir aplicando, más de 30 años después, parte de su metodología. Tal es el caso de Jordi Castro, uno de los responsables de la sección de vela ligera del RCNP, a quien cedió su puesto en 1999, o Pedro Marí, regatista y entrenador de 420 de este mismo club, que lo tuvo de monitor en sus primeros años.