Reunidos en Madrid el 6 de julio de 2023 a las 16:30, el jurado del concurso de cuentos infantiles y juveniles de la revista Adiós cultural, compuesto por Silvia Álava, psicóloga, Javier Fonseca, escritor; Jesús Pozo director de la revista Adiós Cultural y Silvia Carreras por Funespaña y actuando como secretaria del mismo Isabel Montes, falló el premio en ambas categorías, otorgando el galardón infantil al cuento Las rayas del tío Paco, de la autora Haydée Zayas Ramos y el juvenil al relato El niño con miedo al amanecer, de la autora Natalia Coello Galánen ambos casos de manera unánime después de una intensa deliberación.

Antes de tomar su decisión y entrar a valorar los relatos premiados, el jurado quiso señalar la excelente calidad de las obras finalistas (tres por categoría). Todas ellas supieron afrontar los temas de la muerte, el duelo, la pérdida de una manera muy acertada tanto en calidad literaria como en los valores expuestos, teniendo muy presente en todo momento al lector al que se dirigían.

El jurado destacó de la obra infantil su originalidad y humor, así como la calidad literaria de la propuesta, que muestra el proceso de aceptación de la muerte propia y del ser querido desde la perspectiva infantil, con una voz narrativa acorde con la edad del personaje y de los lectores objetivo, inocente y tierna a ratos, que con su mirada limpia acompaña a su tío y muestra a los adultos una manera de afrontar la despedida lejos del drama, muy cotidiana. Así mismo, señaló el especial valor de acercar el concepto de muerte a la infancia como algo natural y parte de la vida al incorporarlo al día a día de los personajes que acogen a su tío enfermo en casa y viven junto a él todo su proceso de paulatino deterioro. El resultado final es un relato donde el personaje protagonista y el niño lector asisten con aceptación a este proceso en el que no se olvida tampoco la visión agradecida y de asunción del personaje enfermo. Una visión, en definitiva, esperanzadora y natural del proceso de muerte que destaca la suerte y el beneficio de poder acompañar a nuestros seres queridos en ese tránsito, tanto para los que se quedan como para quien se va.

Respecto a la obra juvenil, el jurado destacó igualmente el tratamiento coherente y acorde a los personajes y su edad tanto en fondo como en forma, así como el valor del acompañamiento donde se respeta el duelo de quien se despide y de los que se quedan. Todo ello mostrado de una manera valiente y poética, a través de la relación de dos jóvenes amigos que muestran con sus acciones la importancia de los detalles, de vivir con intensidad y calidad frente a la cantidad, y que, con su ejemplo, enseñan a los adultos una manera sana y natural de afrontar la muerte.

 

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