En la película documental “Mientras seas tú”, que ha dirigido con coraje, talento, compromiso, amistad, amor, la cineasta hispano venezolana Claudio Pinto, una mujer susurra unas palabras que acaba de teclear, no sin esfuerzo, en su ordenador: “Pido una muerte digna cuando mis palabras se enroquen en un idioma indescifrable. Cuando mire sin ver, cuando vea sin mirar, vagabunda, ajena a lo que pasa. Cuando me duerma recién vestida, o me despierte recién dormida. Cuando reaccione a un sonido amable o me asuste una vaguedad indescifrable. Cuando mi cuerpo no responda a un estímulo, cuando las voces queridas no me arranquen una sonrisa, cuando las poesías preferidas ya no rieguen mi cara con gotas suaves como caricias. Entonces, quiero una muerte digna”.

La mujer que susurra ese texto que duele y emociona, la mujer que declama palabras que parten y se crían en las entrañas, la mujer que todavía es consciente y padece una enfermedad que se va comiendo su vida en un proceso irreversible, que va mermando su cerebro lenta e implacablemente, es la actriz de raza Carme Elías, que se ha enrolado en la que va a ser la última película de una carrera llena de inmensas creaciones. En lo que va a ser, como ella misma apunta, “mi último viaje consciente”.

Carme Elías fue diagnosticada de Alzheimer hace ahora cuatro años. Desde ese instante, comenzó una aventura llena de sensaciones de todo color, que la actriz ha ido desgranando con un halo de coherencia, compromiso, valentía, militancia, arrojo, y sobre todo solidaridad desde su posición de alcance como intérprete para los que, como ella, están afectados por esta enfermedad (alrededor de un millón de personas la sufren en España actualmente). También comenzó aquel día, el rodaje de una película, por entonces sin título, con la complicidad de su amiga, la directora Claudia Pinto, que ya había dirigido a la actriz en las muy estimables cintas “La distancia más larga” y “Las consecuencias”.

El resultado, la película documental que está a punto de estrenarse, se titula “Mientras seas tú”. Y, déjenme decirlo, es una obra bellísima, emocionante, conmovedora, en la que una mujer aquejada de un Alzheimer que progresa devastador día a día, se deja ver desnudando alma, profesión, recuerdos, familia, premios, miedos, espantos. También esperanza. También. La mirada inolvidable de Carme Elías se pasea por el documental en un trabajo en el que confluyen mujer y cómica: “Con memoria y sin memoria, soy una actriz”, apunta ella. La aventura se adentra en estancias varias, como sus recuerdos en teatros, estudios de doblaje, platós de cine y televisión, dando vida a decenas de personajes que ella mima e intenta entender. La publicación del libro “Cuando ya no sea yo”, escrito tras el diagnóstico que ella define como “regalos de mi fugitiva memoria y de los diarios que he escrito a lo largo de muchos años”. Su compromiso compartiendo la enfermedad en el “Brain Film Festival” de la Fundación Pascual Maragall. La constancia de la importancia de la familia y gente cercana en un proceso doloroso, su hijo, sus amigos, su hermano: “él debe estar hasta el moño de mí, pero si lo necesito, miro a mi alrededor y ahí está Joan, mi hermano”. Y también, el incontestable derecho a una muerte digna, “que me dejen irme, ¿por qué no te dejan escoger cómo morir?”.

Durante el rodaje de este documental, el 18 de marzo de 2021, el Congreso de los Diputados aprobó por mayoría absoluta la Ley Orgánica de Regulación de la Eutanasia. Esta norma, vino a despenalizar la ayuda médica para morir en personas con una enfermedad en fase terminal o una dolencia irreversible con limitaciones en su autonomía física.

Carme Elías quiere ver estrenada su última película. “Mienras seas tú”, que ha dirigido su amiga del corazón, Claudia Pinto.

Se trata de una hermosa aventura cinematográfica en la que un Alzheimer devastador, no puede derrotar la dignidad de una actriz descomunal.