Cacabelos (León) estudia cómo solucionar la situación de su cementerio, después de que se haya quedado sin espacio para realizar nuevos enterramientos, no pueda ampliarlo por estar rodeado de un yacimiento arqueológico ni construir uno nuevo por falta de recursos.
El Ayuntamiento ha encargado un estudio para analizar la posibilidad de aumentar las filas de nichos de tres a cinco alturas, lo que permitiría habilitar entre 15 y 20 nichos nuevos para paliar "cualquier situación de emergencia que pueda haber".
Así lo ha explicado hoy a Efe el alcalde del municipio, Adolfo Canedo (PP), quien ha reseñado que el camposanto sufre problemas de espacio desde hace muchos años, aunque desde hace dos "no hay ninguna posibilidad de disponer de ningún nicho vacío ni de ningún panteón nuevo".
No se puede ampliar porque en los terrenos situados al norte del camposanto se encuentra el yacimiento romano de La Edrada, hallado, precisamente en una finca adquirida para aumentar su capacidad. Además, por el sur linda con una zona arqueológica también protegida por el Ayuntamiento de Cacabelos, mientras que al este y al oeste lo rodean dos carreteras.
Por si esto fuera poco, la difícil situación económica que atraviesan las arcas municipales, con una deuda superior a los diez millones de euros, impiden al Consistorio afrontar la construcción de uno nuevo sin ayuda de otras administraciones, de ahí que la ampliación de las filas de nichos se presente como la solución más inmediata.
No obstante, el camposanto sí tiene capacidad para hacer enterramientos, puesto que muchas familias del pueblo, de más de 4.500 habitantes, tienen en propiedad terrenos, nichos o panteones que se encuentran vacíos.
De hecho, el regidor calcula que podría haber espacio suficiente como para hacer "más de cien enterramientos". "Ahí chocamos con personas de buena fe que adquirieron legalmente esos terrenos, nichos o panteones aunque ahora no los usen. Se trata de una propiedad privada y hay que respetarla", ha valorado al respecto Adolfo Canedo.
El alcalde ha reconocido que, hoy por hoy, resulta "muy difícil" encontrar a una familia de la localidad que no tenga cómo resolver, "aunque sea momentáneamente con algún familiar", el enterramiento. Eso sí, cabe la posibilidad de que algún vecino "que haya llegado nuevo a Cacabelos", no tenga espacio en el camposanto, en cuyo caso, tendría que acudir temporalmente a cementerios de otras localidades del municipio, como Quilós, hasta que se resuelva el problema, "o decidirse por otra fórmula que pueda haber" para dar sepultura a su ser querido.
Si el estudio que ha encargado el equipo de Gobierno determina que no es posible ampliar el número de nichos, el Consistorio buscaría un terreno apropiado para construir un nuevo camposanto aunque, para eso, necesita, "alguna subvención urgente".
La situación económica de este ayuntamiento berciano despertó el interés mediático en septiembre del año pasado, cuando Aldolfo Canedo, que llegó a la Alcaldía tras ganar las últimas elecciones municipales, explicó en una rueda de prensa que había jugado dinero de su bolsillo al Euromillón, la Bonoloto y la Primitiva para tratar de que, un golpe de suerte, ayudase a paliar la coyuntura en la que se encontraban las arcas.