El escritor Fernando Gómez describe en un libro de 'Luciérnaga' (Planeta Libros) "La vuelta al mundo en 80 cementerios" resaltando sus valores culturales, artísticos y patrimoniales.

Planeta Libros acaba de sacar al mercado, bajo el sello de su editorial ‘Luciérnaga’, un nuevo libro con el que muestra su interés por el turismo de cementerios, tal y como se dice en la documentación promocional del libro ‘La vuelta al mundo en 80 cementerios’ de Fernando Gómez.
Explica la información enviada por la editorial que “cada vez más personas se animan a pasar unas horas de su viaje paseando tranquilamente entre tumbas, descubriendo la historia de personajes ilustres o locales allí? enterrados, o maravillándose ante los diversos estilos arquitectónicos y artísticos que se pueden encontrar en estos recintos sagrados”.
El libro en el que Fernando Gómez, con nueve novelas escritas y colaborador en diferentes medios de comunicación sobre temas de historia y misterio, realiza un repaso a ochenta cementerios del mundo que asegura haber visitado y entre los que se encuentran los más conocidos por los seguidores de este tipo de arte y turismo.
Efectivamente, tal y como dice la documentación de Planeta, “los hay de todo tipo, desde los más monumentales como el de Viena o el de Père Lachaise en Francia, donde contemplar impresionantes esculturas y panteones; a los más inquietantes como la perturbadora Isla de las Muñecas de México o el Cementerio de los Suicidas de Berlín; pasando por otros de lo más variopintos como un cementerio dedicado a prostitutas en Londres (el cementerio de Cross Bones), o a perros en Francia”.
Y efectivamente, a cada uno dedica sus textos sobre las particularidades de cada uno de ellos. Aunque algunos se llevan mejor y más documentación que otros a los que los despacha con dos páginas, es un buen libro muy recomendable para adentrarse en este mundo de lo patrimonial y artístico que tienen los cementerios monumentales y que tanto hemos difundido y defendido desde Adiós Cultural. Además, Fernando Gómez aporta informaciones curiosas y sabrosas sobre personajes enterrados en los recintos.
Bienvenida sea pues esta novedosa y diferente 'guía turística' para entre todos continuar en el camino de la desdramatización y el aprovechamiento cultural y artístico que, como tantas otras veces hemos defendido aquí, tiene cualquier cementerio del pueblo más pequeño.
Y como afirma editorial Planeta, y suscribimos en su totalidad, se trata de “una forma diferente de viajar y de conocer la cultura y la historia de nuestro destino".
Los cementerios españoles analizados y descritos en el libro están los de Montujïc (Barcelona), Almudena (Madrid), San Fernando (Sevilla), Inglés (Malaga), General de Valencia, Soledad de Huelva. También habla de la Sima de los huesos de Atapuerca y el epílogo está dedicado al de Sant Andreu en Barcelona.
Jesús Pozo. Director de Adiós Cultural
 
Los cementerios son el mejor libro de historia
Introducción del libro por  Fernando Gómez
“Era uno de esos días en que las preocupaciones, por pequeñas que se presenten, acaban convirtiéndose en muros difíciles de salvar. Suele pasarme a menudo, en lunes habitualmente. Como única forma de combatir ese estado de ánimo no hallo mejor solución que sentarme en uno de los bancos de una plaza próxima a mi casa y contemplar cómo discurre la vida, intentando buscar en los rostros desasosiegos similares a los míos con la esperanza de no sentirme el único ser desdichado de este planeta.
Tan enfrascado estaba en esa terapia que no reparé, hasta que tosió, en que a mi lado había sentada otra persona. Al mirarlo comprobé que era un hombre de una edad indefinida, debía moverse en esa franja imprecisa de los setenta u ochenta años.
(...) Nuestras miradas se cruzaron por unos segundos y fue entonces cuando aprovechó para dirigirme la palabra. Lo que dijo, por curioso, lo recuerdo letra por letra: «He visitado ochenta cementerios de los cinco continentes y allí descansan quienes en sus vidas tuvieron días tan malos o peores que los que está usted viviendo».
A partir de entonces nació una conversación fluida. Él deseaba hablar y yo empecé a sentir deseos de que me contara esos singulares viajes. Los cementerios, me dijo, son el mejor libro de historia, en ellos reposan las personas que la escribieron.
Lo que a continuación transcribiré, con toda la fiabilidad que permita mi memoria y tomada prestada su voz, es cuanto esa persona misteriosa me contó durante los días que nos hicimos compañía. Espero no olvidarme nada, sería un error imperdonable.”

Fotografía facilitada por la oficina de prensa de la editorial.